En una formación para introducir los conceptos de Mejora Continua (Lean, Mejora de Procesos, Kaizen, etc.) en una empresa, uno de los operarios de línea puso una pregunta con mucho trasfondo en el tema de conversación, que se la plantean, o lo deberían hacer, los directivos cuando se enfrentan a la implantación de un proyecto de Mejora Continua en su empresa.
La causa principal de que un proyecto no funcione
La pregunta en sí era algo parecido a: «Por orden de importancia, ¿cuáles es la causa principal de que un proyecto de este tipo no funcione?»
La respuesta correcta, por supuesto, es Dirección.
Como en muchas otras iniciativas, Prevención de Riesgos Laborales, Medio Ambiente, Calidad, etc., Dirección es la que tendrá el deber de asegurar la supervivencia de la Mejora Continua a través de:
1. Dotar los recursos necesarios
Económicos, de estructura interna y de horas del personal para la realización de actividades y planes de acción, de soporte externo en el caso que se considere necesario la presencia de expertos que den apoyo en alguna de las fases: estrategia, arranque, sostenibilidad, etc.
2. Romper con el paradigma directivo existente
Tendrá que aceptar que su gente, la gente del Gemba, sea la que decida cómo deben funcionar diferentes procesos, dentro de los parámetros establecidos por la empresa, por lo que deberá dar la autonomía suficiente para realizar los cambios necesarios aún cuando, en algunos casos, significa romper con costumbres «milenarias» dentro de la empresa o con procedimientos que, en su momento, definió la propia Dirección.
3. Tener paciencia
Para que todo el mundo se suba a esta nueva ola, para ver los resultados de las diferentes actividades, para que nuestro personal (incluido nuestro staff y equipo directivo) se adapte a esta nueva dinámica de trabajo, para continuar aunque algunas cosas no salgan tan bien como se había planeado, etc.
4. Dar ejemplo y ser consecuente
Si hemos dicho que habrá tiempo para hacer los cambios, habrá que facilitarlo y no ser el principal impedimento. Si le hemos pedido a la gente que participe activamente y aporte ideas de mejora, después tendremos que ser capaces de responder a esas iniciativas de la gente atendiendo las ideas que aparezcan, planteando una respuesta a la misma y ejecutando aquellas que se consideren oportunas. Como decía algún dicho popular consiguiendo el efecto «Santo Tomás», la gente cree cuando ve cosas tangibles, no sólo cuando prometemos cosas (para eso ya están la mayoría de los políticos)
Y, seguramente, habría algunos puntos más que añadir que también son relevantes pero lo importante es que la Mejora Continua necesita que Dirección sea el principal creyente, el resto es sólo cuestión de trabajo y esfuerzo.