Esta noche han finalizado las Fallas (Falles en valenciano), fiestas con una arraigada tradición en la ciudad de Valencia y diferentes poblaciones de la Comunidad Valenciana. El evento principal dentro de estas fiestas es la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados, donde todas las comisiones falleras, falleras y falleros con sus trajes regionales y sus mejores galas, hacen una ofrenda floral a la patrona de Valencia, a la Virgen de los Desamparados.
Como no podía ser de otra manera, las Fallas han tenido su tiempo en las noticias y en una de éstas hablaban con uno de los responsables de la confección del manto que cubre la estructura de la imagen y hacía mención a que el proceso de confección, con un diseño diferente cada año, estaba avanzando a un buen ritmo ya que las flores eran de buena calidad y reducía la necesidad, y tiempo necesario, para cribar y limpiar las flores que no estuvieran en perfecto estado.
Calidad del material en procesos industriales
Si volvemos la vista a los procesos industriales no encontramos con una problemática que se repite en la mayoría de empresas, la calidad de los materiales con los que se trabaja y el impacto sobre la operativa de las mismas.
Será coincidencia pero en diferentes clientes nos hemos encontrado con impactos significativos que los materiales, y la calidad de los mismos estaban teniendo sobre la productividad, la calidad y el servicio.
Los motivos de la rebaja de la calidad de los materiales, como todo, tienen diferentes orígenes:
- El alto peso que tienen sobre el coste total del producto y la necesidad constante de rebajar el coste por unidad de producto fabricado. Buscando proveedores de bajo coste pero discutible calidad de producto y servicio.
- La concentración de proveedores, proveedores únicos, oligopolios o proveedores de grupo, que provocan que no hayan muchas alternativas para poder adquirir ciertos materiales, ni en la calidad de los materiales, ni en las condiciones “logísticas” de compra.
Sin negar algunas de estas evidencias es importante ser consciente del impacto (de los costes globales de la compra del material) que esta situación puede provocar:
- Acumulación de stocks (costes almacenaje, financieros, recursos, etc.) y generación de obsoletos al comprar lotes excesivos y/o con un porcentaje elevado de rechazos dentro de lo recibido. Debido a condiciones de compra y a las incidencias de calidad que provoquen una necesidad de cobertura añadida.
- Costes de No Calidad asociados al control de la recepción de los materiales y la gestión posterior de incidencias.
- Pérdida de eficiencia en nuestros procesos productivos y que normalmente no se imputan, añaden, al coste de la compra. Se entiende que es trabajo del personal productivo el ser capaz de trabajar con estos materiales consiguiendo la misma productividad que si fueran los adecuados.
- Pérdida de servicio debido a plazos de entrega largos, incumplimiento de los mismos o dificultad de gestionarlos.
Es importante ser consciente de los efectos que los materiales tienen o pueden tener en la operativa de la empresa y seamos capaces de medir este impacto para ver los costes y beneficios reales de la gestión que se está realizando sobre los materiales.