La famosa metodología de las ‘5S’, utilizada para conseguir mejorar la organización del entorno de trabajo, a través de sus cinco fases (seleccionar; ordenar; limpiar; estandarizar; mantener) es la más buscada en Internet de todas las herramientas ‘lean’. Pero parece ser que sólo se aplica en tiempos de bonanza económica.
Necesidad de Organizarse
Y digo esto, por diferentes señales que hemos recibido en los últimos meses. Estando como estamos inmersos en el actual período de crisis económica:
- Los cursos donde venían muchas personas, se anulan por falta de asistencia
- Las empresas que querían organizar su compañía, ahora sólo están obsesionadas en reducir costes, lo que es siempre saludable, incluso en los tiempos de ‘vacas gordas’.
Pero las ‘5S’, herramienta de complemento, hay que saber combinarlas con otras actividades, como lo son la de mantener la organización del ‘gemba’, no por cuestiones meramente estéticas, sino por motivos de funcionalidad. Para lo primero, siempre nos quedarán los ‘reconocidos zafarranchos de limpieza’, cuando nos visita alguien y que tantas horas sin sentido roban a la creación de valor añadido de la empresa.
Las compañías que se dedican con ahínco al tema de las ’5S’, consiguen los siguientes beneficios: una mejor ocupación del (caro y escaso) espacio del que disponen; una mayor productividad a través de ‘encontrar todo en su lugar siempre’; una mejora sustancial en el proceso, por medio de tener definidos unos estándares que ayudan y no entorpecen la gestión; etc. Podríamos seguir hasta enumerar muchas más ventajas.
El reto que tenemos por delante es conseguir que nuestra organización sea ‘enseñable’, es decir, que pueda ser visitada por personal del exterior, de cualquier tipo, sin preaviso, en cualquier momento. El desplegar e impregnar esta mentalidad a toda la organización de manera sistemática, hará que cualquier otra actividad de la que se trate, se realizará de manera más efectiva y brillante.
